Aun estoy distribuyendo los muebles, poniendo almohadones aquí y allá, colgando cortinas, abriendo ventanas y hablando a mis plantas para que no tengan añoranza. Encenderé la chimenea porque el día … Continúa leyendo Sed bienvenidos…

Aun estoy distribuyendo los muebles, poniendo almohadones aquí y allá, colgando cortinas, abriendo ventanas y hablando a mis plantas para que no tengan añoranza. Encenderé la chimenea porque el día … Continúa leyendo Sed bienvenidos…
Desde la loma veo la suavidad del crepúsculo que se enreda en la dureza de las ramas. Todo arde. La tierra, vestida de invierno, guarda en su seno la esperanza … Continúa leyendo De invierno…
El sol entró despacio, en silencio, y trepó por las esquinas de mi cama. Abrí los ojos. La sensación de verano me acarició la piel. Hoy era lunes, lunero. Atrás … Continúa leyendo De lunes, lunero…
Sí, juguemos, hoy es viernes, día de galletas y besos. Mientras se hornean en la cocina me llega el olor a vainilla, canela y caramelo. Sus aromas me rodean y se … Continúa leyendo Juguemos…
Los días eran blancos y azules. El cielo, inquieto e indeciso, se cubría de pequeñas hebras algodonosas que viajaban sin descanso. Se resistía, igual que nuestra piel rebosante de sabor … Continúa leyendo De otoño…
«Pones la noche. Te pienso. Pones el día. Te espero. Y en esta vida me cumplo, madurando con lo triste. Y aunque todo parece mentira, yo te creo. Sé que … Continúa leyendo De lunes y Celaya…
El fuego se eleva por los aires mientras las puertas invisibles se abren a paraísos encantados, las princesas cautivas escapan de sus prisiones, las muchachas enamoradas sueñan con el … Continúa leyendo Solsticio de verano…
La vida se mueve Entre luces y sombras Con el aliento de los deseos que nos atan Yo me dejo llevar Como un suspiro dulce Que templa las horas … Continúa leyendo Poetizando de lunes…
… la luz ha entrado despacio y ha bordeado los extremos de mi cama… Me ha dado un beso suave, mientras yo aún soñaba. No quiero despertar, pero alguien me … Continúa leyendo Sí…
… ni el tiempo, ni la ausencia… Que pueda destruir esas «pequeñas cosas» que existen entre nosotros…